Las arritmias son trastornos de la frecuencia cardíaca en los que que se ve acelerado o disminuido su ritmo, o incluso que sigan un patrón irregular. Cuando el pulso sea demasiado acelerado lo llamaremos taquicardia. Por el contrario, cuando el pulso sea muy lento lo denominaremos bradicardia.
Los medicamentos antiarrítmicos los usaremos para prevenir que la arritmia que haya podido sufrir el paciente se presente de nuevo. Sin embargo, algunos de ellos pueden tener efectos secundarios ya que no todas las arritmias responden bien a los medicamentos.
Existen múltiples tipos de arritmias de patrón irregular, pero las más habituales son:
- Fibrilación auricular: latidos auriculares incoordinados y desorganizados que producen un ritmo rápido e irregular.
- Fibrilación ventricular: ritmo ventricular rápido (>250 lpm) e irregular, de morfología caótica que lleva a la pérdida total de la contracción cardíaca.
- Taquicardia auricular: se caracteriza por un electrocardiograma en el que la onda P es de morfología anormal y el complejo QRS es angosto e irregular.
- Taquicardia ventricular: es un ritmo cardíaco rápido que se inicia en los ventrículos.
- Asistolia: ausencia total de actividad eléctrica en el miocardio.
Fibrilación ventricular |
Fribrilación auricular |
Taquicardia auricular |
Las arritmias son causadas por un problema en el sistema de conducción del corazón. Puede darse de que haya otras zonas del corazón que emitan impulsos eléctricos (focos ectópicos), o puede ser que las señales que se envían no se mueven bien o no se mueven.
Los principales factores de riesgo que influyen en las probabilidades de sufrir un arritmia son:
- Desequilibrios químicos de la sangre, como un nivel anormal de potasio.
- Una miocardiopatía y un cambio o debilitamiento del miocardio.
- Una insuficiencia cardíaca.
- Hiperactividad de la glándula tiroidea.
- Un ataque cardíaco previo.
Otras sustancias o fármacos que pueden causar una arritmia son las anfetaminas, la cafeína, la cocaína, los beta bloqueantes, los psicotrópicos y los simpaticomiméticos. Incluso algunas veces los antiarrítmicos prescritos pueden producir otro tipo de arritmia.
Síntomas
Las arritmias pueden estar presentes todo el rato o de forma intermitente, que será cuando sean más difíciles de monitorizar para su diagnóstico. Cuando la arritmia esté presente podremos notar o no ciertos síntomas, o solo cuando estemos más activos. La graduación de los síntomas es de leves, graves o potencialmente mortales.
Los síntomas más comunes son:
- Dolor torácico
- Desmayos
- Latidos cardíacos rápidos o lentos (palpitaciones)
- Mareo, vértigo
- Palidez
- Dificultad respiratoria
- Latidos intermitentes
- Sudoración
Diagnóstico
Lo primero que hará el médico será auscultar el corazón con un fonendo y sentir el pulso. La tensión arterial del paciente que sufra la arritmia podrá estar normal o disminuida.
Para identificar la arritmia que sufre el paciente podremos realizar los siguientes exámenes:
- Monitorizar al paciente con un monitoreo Holter durante 24 o 48 horas.
- Angiografía coronaria.
- Electrocardiograma.
- Ecocardiografía.
- Estudio electrofisiológico.
Tratamiento
Como tratamiento urgente para una arritmia seria los posibles tratamientos son: una terapia de shock eléctrico (desfibrilación o cardioversión), una implantación de una marcapasos temporal o medicación intravenosa.
Marcapasos |
Otro tratamiento posible es la ablación cardíaca en la que se extirparán las zonas del corazón que puedan estar causando problemas en el ritmo cardíaco. También existe la implantación de un cardiodesfibrilador en el corazón, que se usará en pacientes con alto riego de muerte cardíaca súbita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario